domingo, 29 de mayo de 2016

Aprender a montar en bicicleta

Montar en bicicleta es una habilidad psicomotora gruesa que puede llegar a ser muy placentera para niños/as con autismo y una actividad que puede llegar a ser compartida con los adultos y los hermanos.

A continuación, les comentaremos como en La pieza del puzzle enseñamos dicha habilidad.

Objetivo: Enseñar a vuestro hijo/a a montar en bicicleta

Qué hacer:

1. De primeras, hay muchos niños que tienen miedo a montar en bicicleta siendo en muchos casos un objeto aversivo para ellos, ya sea por experiencias pasadas, o por ser un objeto desconocido que incluye velocidad. Por ello, lo primero que haremos será condicionar la bicicleta positivamente. En un primer contacto, le haremos que la toque, que se suba en ella, etc.. e iremos poco a poco aumentando dicho contacto, en diferentes días y reforzándolo positivamente con reforzador primario, ej: trozitos de gominolas, trozitos de chocolate, etc.. 

2. Cuando el niño/a ha perdido el miedo y la bicicleta deja de ser un objeto aversivo, trabajaremos los siguientes pasos.

- Montar en la bici y agarrarse al volante correctamente. 

- Pedalear: Tendremos que elegir un recorrido en llano y sin obstáculos. Colocaremos los pies del niño/a en los pedales y le ayudaremos a realizar el movimiento del pedaleo. Al principio, daremos ayuda física teniendo nuestra mano en todo su pie, primero un pie, luego el otro pie y así sucesivamente. Cada dos pedaleadas reforzaremos con el reforzador primario elegido e iremos distanciándolo a medida que va consiguiendo el objetivo (dos pedaleadas, cuatro pedaleadas, y así sucesivamente hasta lograr un buen recorrido). A veces, podemos encontrarnos con la dificultad de que al niño/a se le resbalen los pies o no los fijen bien al pedal. Para ello, podemos usar una cinta que los sujeten bien, la cual, ha medida que el niño/a vaya aprendiendo el pedaleo, podrá ser retirada.

- Mirar hacia delante: Mientras el niño/a pedalea, colocaremos un trozo de reforzador primario (ej: trozito de gominola) a la vista del niño/a dirigiendo su mirada hacia donde debe mirar. Cada intervalo de tiempo mantenido con éxito (ej. 2 segundos), se lo entregaremos y le diremos ¡qué bien ha mirado! para reforzar dicha conducta. El tiempo de contacto ocular en el reforzador tendrá que ir en aumento gradualmente (2 segundos, 4 segundos, etc..).

- Girar el volante: Elegiremos un recorrido donde haya presencia de curvas que nos tengan que hacer girar con el fin de enseñarle a girar el volante en el momento oportuno. Se le brindará ayuda física en las manos y se le reforzará con primario cada vez que giremos el volante. 

- Frenar: Para enseñar a frenar debemos de elegir un recorrido que tenga obstáculos, si no los hay, los podemos crear poniendo cajas en el camino u otro obstáculo posible. Dándole ayuda física en las manos para apretar el freno, frenaremos cada vez que nos encontremos con algún obstáculo y le reforzaremos por ello. 

Todos estos diferentes pasos se van incluyendo en dicho orden en el proceso de enseñanza de la habilidad. 

A continuación, les mostramos un vídeo de uno de nuestros alumnos montando en bicicleta. 




Cualquier duda al respecto, contacte con un profesional cualificado.

domingo, 22 de mayo de 2016

Procedimientos de cambio de conducta II: La extinción y el reforzamiento diferencial de otras conductas

La extinción consiste en la eliminación de todo tipo de refuerzo que mantiene una conducta particular. Se debe tratar al niñ@ exactamente como si la conducta no estuviera ocurriendo, continuaremos haciendo lo que en ese momento haya provocado la conducta inadecuada, por ejemplo, si estamos comiendo y el niño/a se pone a gritar, continuar dándole de comer, y no hacer ningún caso a esos gritos. El tono de voz debe mostrar calma y no verse alterado.
Si se producen conductas de autoagresión, realizaremos un bloqueo físico que impida que el niño/a se haga daño, pero debemos ser lo más asépticos posible, mantener la calma y el tono de voz neutro y no hablar al niño/a para intentar calmarlo, ya que así solo conseguiremos darle más atención a lo que está realizando.
Es importante tener en cuenta:

-          Pico de extinción: La conducta a eliminar aumenta considerablemente antes de que comience a disminuir. Una vez iniciado el procedimiento no dejar de aplicarlo, ya que si se refuerza y la conducta ha aumentado, las sucesivas veces será más difícil extinguir.





-        Una vez que la conducta ha sido extinguida y lleva tiempo sin aparecer, puede darse una recuperación temporal espontánea de la misma. Si se da el caso, hay que mantenerse firme. Esta recuperación es menor en tiempo y en intensidad. Muy importante no ceder porque entonces volverá a los valores iniciales.

Acompañando a la extinción podemos aplicar el reforzamiento diferencial de otras conductas (RDO), este procedimiento consiste en enseñar y reforzar  una actividad alternativa y más apropiada. Por ejemplo un poner al niño/a a realizar algo manipulativo como puede ser insertar monedas en una hucha.

Cuando estamos extinguiendo una conducta, lo más efectivo para reconducirla cuanto antes es reforzar al niño/a por realizar una que sea incompatible con ella, por ejemplo, si tiene una rabieta y está tirado en el suelo pataleando y pegando, podemos sentarlo en una mesa o en el mismo suelo y ayudarlo a realizar un puzzle, poco a poco retiraremos nuestra ayuda hasta que  él/ella se quede realizándolo por si solo/a y su enfado irá disminuyendo y se calmará.      
Buenas noticias: muchas conductas inapropiadas tienden a desaparecer cuando se aprenden conductas apropiadas que son incompatibles entre ellas, de manera que si se está realizando una, no es posible realizar la otra.


Este procedimiento, además de ser útil para acompañar a la extinción, también lo es para aplicarlo con las conductas de autoestimulación, por ejemplo, si el niño/a aletea, podemos hacer que realice collares, o cualquier otra tarea manipulativa con las manos. Esto hará que se reduzca el aleteo tanto en frecuencia como en intensidad.

lunes, 16 de mayo de 2016

¿Cuál es el colegio más adecuado para mi hijo/a?

La mayoría de las familias que  tienen un niño con TEA se ha planteado esta pregunta alguna vez ¿cual es el colegio más adecuado para mi hijo/a? El Sistema Educativo dispone de diferentes modalidades de escolarización. A continuación os exponemos las distintas clases de centros de atención educativa en los que pueden ser escolarizados los niños con TEA :

- CENTRO ORDINARIO

El niño se integra en un aula ordinaria con las adaptaciones y los apoyos específicos para optimizar la respuesta educativa.

Cuando los alumnos con TEA son escolarizados en centros ordinarios será preciso realizar revisiones a lo largo de la escolarización para determinar la adecuación de su evolución. La variabilidad presente dentro del Espectro Autista hará que, algunos de estos niños, precisen recursos altamente especializados que no se encuentran disponibles en todos los centros ordinarios de la red educativa, promoviendo en este caso su escolarización en aquellos que, dentro del sistema ordinario, sean designados como centros preferentes que atienden alumnado que precisa recursos materiales y personales de difícil generalización.

- ESCOLARIZACIÓN COMBINADA

El alumno asiste de forma simultánea a un centro ordinario y a uno específico. Ambos centros desarrollan el currículo conjuntamente y requiere la coordinación de todos los profesionales implicados.

- AULAS DE EDUCACIÓN ESPECIAL UBICADAS EN CENTROS ORDINARIOS

Permiten al alumnado con TEA beneficiarse de interacciones sociales, con niños normotípicos y a la vez recibir un aprendizaje adaptado e individualizado.

- CENTRO ESPECÍFICO

El alumno interactúa con otros escolares ampliando las posibilidades de relación con otros niños que no tienen autismo.

- CENTRO ESPECÍFICO DE AUTISMO

Para alumnado que necesita condiciones de aprendizaje muy individualizadas. 

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A la hora de elegir un centro u otro, lo más importante es pensar en el niño, no hay dos niños TEA iguales, por lo que no es aconsejable pensar que porque otro niño este muy bien en un colegio el nuestro también va a estarlo.

La situación ideal desde la que partir que recomendamos a nuestros alumnos/as es la de  ir a un colegio ordinario en el que poder combinar la terapia ABA que está recibiendo en colaboración con la escuela, pudiendo hacer intervención directamente en el aula y donde haya una estrecha coordinación en el establecimiento de objetivos entre colegio, familia y terapeutas. Pero todos sabemos que esto es muy difícil y que hay pocos centros que lo permitan.

A partir de aquí, lo que debemos buscar para nuestro/a hijo/a es el colegio que nos ofrezca mayor grado de normalización, inclusión, compensación, calidad, equidad en el proceso educativo, interacciones personales y sociales en el aula y en el centro.

Por la experiencia que varias familias nos han hecho llegar, también os recomendamos que elijáis un centro donde los profesionales, educadores, personal de apoyo, etc… que vayan a interactuar con vuesto hijo/a, tengan una formación y experiencia en el trato con niños/as con TEA. Así como que su tutor/a sea una persona que os transmita confianza ya no solo en lo referente a la educación del niño/a sino también en lo que compete a la relación de comunicación que establezca con vosotros/as.

En cuanto a las características del centro que atiende al alumnado con TEA resulta adecuado que el centro educativo sea pequeño, que además cuente con los recursos necesarios que puedan apoyar e incentivar las mejoras que intentemos potenciar, siendo necesaria una apropiada organización como elemento favorecedor de la integración y que asimismo todo el profesorado se implique en la atención educativa de este tipo de alumnado.

Información extraída de: Guía para la integración del alumnado con TEA en Educación Primaria (Instituto Universitario de Integración en la Comunidad – INICO Salamanca 2012)


lunes, 9 de mayo de 2016

Procedimientos Cambio de conducta I: Reforzamiento Positivo y Reforzamiento Negativo

La terapia ABA trabaja mediante la manipulación deliberada de los antecedentes y consecuentes de una conducta para producir cambios en ella.

A continuación comentaremos dos procedimientos manipulando las consecuencias de una conducta:

Reforzamiento positivo: Consiste en reforzar una conducta adecuada con algo agradable y positivo. Este refuerzo debe ser presentado inmediatamente a la ocurrencia de la conducta. A través de este procedimiento aumentamos la probabilidad de que la conducta reforzada ocurra en el tiempo.

Ejemplo: Ana ha guardado todos sus juguetes después de jugar por lo que su mamá le pone los dibujos antes de ir a cenar.

Reforzamiento negativo: Consiste en retirar algo desagradable y aversivo tras la presencia de una conducta adecuada. La retirada del estimulo negativo debe ser inmediata tras la ocurrencia de la conducta. A través de este procedimiento aumentamos la probabilidad de que una conducta adecuada ocurra en el tiempo.

Ejemplo: Martina ha entrado en rabieta por haberse manchado la ropa mientras comía por lo que su mamá ha esperado a que Martina se calme para limpiarle la ropa.

lunes, 2 de mayo de 2016

FAQ. Preguntas y respuestas sobre la Terapia ABA

A lo largo de estos años, hemos comprobado que hay una serie de preguntas comunes que las familias nos hacéis. La terapia ABA, quizá porque aún no es muy conocida , sobre todo en España, y que son pocas las familias que cuentan su experiencia, genera una serie de cuestiones y dudas que desde aquí nos gustaría aclarar y animaros a todo el que quiera hacerlo a contarnos su experiencia.


1. ¿QUE TIPO DE PROGRESO PUEDO ESPERAR?


El progreso del niño depende de dos factores: su habilidad innata para aprender y la calidad de su programa de instrucción. En cuanto a la habilidad para aprender, aunque es realmente algo que nadie puede predecir, sí existen estudios que indican que a menor edad cronológica a la hora de comenzar el tratamiento, mejores son los resultados obtenidos.


Estudios más recientes, indican que el progreso del niño durante los primeros meses de tratamiento, es un indicador más claro de su habilidad de aprender, más que el nivel de compromiso inicial. La calidad del tratamiento es algo sobre lo que ustedes pueden actuar directamente, entendiendo por calidad varias cosas: el número de horas semanales dedicado a las terapias, siendo tan extenso el currículum a cubrir por el niño, es mejor empezar cuanto antes y con la mayor intensidad posible.


La calidad del instructor es igualmente importante, hacer terapia de A.B.A. es mucho más que darle un premio al niño por un buen comportamiento, se necesitan mucho tiempo de práctica, atención a los detalles y simplemente mucho trabajo. Es importante mirar el progreso en todas las áreas, no contentarse con cualquier progreso, si el niño progresa en unas áreas y en otras no, algo en el programa, no el niño, está fallando.


Los tratamientos y los progresos se deben ver en el largo plazo, no es una progresión lineal, emocionalmente debemos estar preparados para algunos retrocesos durante el proceso, por esto es importante un programa de calidad que pueda arrojar resultados mensurables, mes por mes.



2. QUIERO QUE MI HIJO APRENDA EN FORMA NATURAL Y EL A.B.A. ME PARECE MUY RÍGIDO


A.B.A. es una técnica de enseñanza diseñada para maximizar el aprendizaje y mantener los resultados a largo plazo.


Si bien es cierto que parece muy poco natural al principio, es porque la discapacidad de los niños hace necesario que ciertos elementos del proceso de aprendizaje deban ser exagerados. En la medida en que un programa de A.B.A. avanza y tiene éxito, la mente del niño cambia y este empieza a “aprender como se aprende” entonces el proceso de enseñanza empieza a verse más natural.


Lo más triste que pueda suceder es que los padres se aferren a la ilusión que sus hijos deban aprender de “forma natural” como sus compañeros de edad cronológica y lo ubiquen en un entorno típico (aun con apoyo extra) esperando que aprenda como lo hacen los demás. Los niños con trastorno del desarrollo generalmente están ya atrasados en muchas habilidades incluso anteriores a los dos años de edad. La enseñanza en preescolar requiere de muchos prerrequisitos que estos niños no tienen y es imposible que aprendan de forma “natural” cuando simplemente no entienden lo que ocurre en el mundo a su alrededor.

3. NO ME IMAGINO A MI HIJO PASANDO TODO EL TIEMPO CON ENSAYOS DISCRETOS ¿NO NECESITA TAMBIÉN JUGAR, IR AL COLEGIO, ...?

Un programa de ABA no es solo ensayos discretos (o trabajo en la mesa). Aunque los ensayos discretos ocupen la mayor parte del programa al comienzo, los mismos principios que se utilizan para enseñar habilidades muy básicas se aplican a todo tipo de ambientes, incluyendo el colegio, la casa, la comunidad,... .

Los niños con desarrollo típico el aprendizaje es un proceso continuo y que ocurre sin que los adultos apenas lo notemos. Para los niños Trastorno de Desarrollo, se necesita la adecuada planificación de personas  capacitadas para proveer la mayor cantidad de oportunidades de aprendizaje posibles.
Esto implica consistencia a través de todos los ambientes, incluido el colegio y el compromiso de los padres es esencial para un programa exitoso. Sí, los niños autistas van al colegio con niños de desarrollo típico, pero esto ocurre cuando están preparados para aprender y beneficiarse en dicho ambiente, para que esto sea posible el trabajo conjunto entre profesores y terapeutas es fundamental.


4. ¿QUE HAY ACERCA DE LAS DIETAS, VITAMINAS, FÁRMACOS Y OTRAS TERAPIAS?
Para muchos niños puede existir una manera de corregir cualesquiera que sea el mecanismo biológico que este causando los síntomas de su autismo.


Sin embargo, su niño puede haber ya perdido años de aprendizaje en su lenguaje, habilidades de juego y sociales, respecto a los niños de su edad.
Necesitará mucha ayuda para aprender estas habilidades y deberá ponerse al día cuanto antes mejor. Independientemente de la eficacia de otro tipo de intervenciones, hay muchísimo que enseñar y es aquí donde un programa A.B.A. es inmensamente beneficioso.


5. HE OIDO DECIR QUE LA TERAPIA A.B.A. LLEVA A LOS NIÑOS A PORTARSE COMO ROBOTS
¿Alguna vez ha visto a otra persona o a usted mismo intentando aprender otro idioma? Cuando está aprendiendo suena ensayado, forzado, antinatural y puede sentirse el estrés de tratar de encontrar las palabras y seguir una conversación al mismo tiempo.


Con el tiempo y la práctica hablar se vuelve más fácil y natural. O puede usted aprenderse algunas frases para decir en ciertas situaciones típicas y salir airoso, como pedir un café o algo de comer.
Lleva tiempo y práctica para cualquier niño, con cualquier nivel de habilidad, aprender a hablar fluido en su idioma, pero como sus errores ocurren cuando habla de forma espontánea y no existe un retraso cronológico entonces nos parecen graciosos, pero lo cierto es que todos lo logran de la misma forma, practicando, cometiendo errores, siendo corregidos, aprendiendo.


6. ¿PUEDE SER QUE UNA MEZCLA DE TERAPIA A.B.A. CON OTRAS TERAPIAS SEA MEJOR PARA MI HIJO?
En cierta forma, un programa A.B.A. siempre incorpora otros métodos de enseñanza.
Teniendo en cuenta que el objetivo principal del programa es el de enseñar al niño a aprender de forma natural -esto es por observación e imitación- el programa por definición deberá incluir una práctica cuidadosamente guiada en ambientes educativos y sociales naturales. Esto sucede al final del programa (aunque este final es un período de varios años) y es igualmente importante que la enseñanza inicial se concentre en los ensayos discretos.


Los estudios demuestran que la terapia A.B.A. cubre la mayoría de las déficits  a trabajar con niños con trastorno del desarrollo. Es importante tener en cuenta otras intervenciones en dificultades de aprendizaje, para cuando A.B.A. haya arrancado el punto de partida y el niño haya “aprendido a aprender” pueda beneficiarse de ellos.
7. ¿ES A.B.A. APROPIADO PARA NIÑOS MAYORES?


Existe la creencia que A.B.A. es solo apropiado para niños pequeños (menores de 5 años), la cual probablemente viene del éxito del estudio de UCLA “Young Autism Project” en donde muchos niños alcanzaron un nivel de funcionamiento normal.
Es cierto que el mayor beneficio se obtiene al empezar a una edad temprana (antes de los cinco años). Sin embargo esto no tiene importancia si consideramos que lo principal es pensar que el niño tenga el mejor futuro posible. Los principios de enseñanza del método A.B.A. se aplican para personas de todas las edades. Esta es una ciencia del comportamiento humano. Nos guía sobre la forma de conseguir las metas de desarrollo de habilidades independientemente de la discapacidad y la edad del paciente.


Dentro de los límites del potencial del niño, una intervención basada en los principios del A.B.A. le ayudara a aprender al máximo de sus capacidades. Aun cuando una recuperación total no sea una opción debido a la severidad de su discapacidad o debido a su edad, ningún método de enseñanza ha probado ser tan efectivo en la habilidad de desarrollar al máximo su potencial como A.B.A.

8. ME PREOCUPA EL HECHO QUE HACER TANTAS EXIGENCIAS A MI HIJO DETERIORE NUESTRA RELACION.



Un programa A.B.A. exige mucho de su niño y de los que están a su alrededor.
Es cierto que para que el programa sea efectivo, usted como padre deberá ser quien imponga muchas exigencias. Si por ejemplo, todos sus terapeutas o maestros le exigen que use lenguaje para pedir zumo, pero usted se lo da cuando se da cuenta de que lo quiere y antes de que él lo pida, probablemente no generalice sus habilidades de comunicación tan rápidamente.


Este es un ejemplo simple, pero existen otras muchas cosas que deberá pedirle a su niño que haga y que es posible que  desemboquen  en un comportamientos inadecuados como llorar, patalear, gritar, salir corriendo, pegar, etc…  y usted como padre ceda para que las cosas sean más fáciles para su hijo.
Sin embargo, en el largo plazo, si usted se mantiene firme en sus exigencias y ayuda de esta forma al proceso de aprendizaje en lugar de ceder al deseo (inconsciente) de su hijo de no cambiar las cosas, finalmente las recompensas son mayores para todos y la convivencia más armónica.


¿Afectará esto la relación de amor y confianza que tiene con su hijo? De ninguna manera. Esta relación está basada en miles y miles de interacciones positivas, exitosas y alegres. Se necesitaría un esfuerzo muchísimo mayor para deshacer algo tan profundo y poderoso como su relación con su hijo. Ser firme cuando se necesita es el camino más rápido para cambiar comportamientos indeseados y para generar experiencias positivas. No tiene opción, a medida que su hijo crece tendrá que hacerle cada vez más exigencias. Es lo mejor para usted y para su hijo, enséñele a ser exitoso, independiente, a controlarse el mismo  y  su ambiente y así será capaz de encontrar su felicidad  y la de los demás.
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Por el momento esto es todo. Esperamos que os hayan servido de ayuda y recordaros que siempre podéis dirigiros a nosotras para aclarar cualquier duda más que os pudiera surgir acerca de la terapia ABA. Estaremos encantadas de poder ayudaros.