Los niños ya a los 12 meses pueden ser capaces de agarrar una pintura y hacer marcas en un papel, desde entonces y de manera progresiva van desarrollando un mejor control manual y un agarre más eficiente consiguiendo dibujar trazos más definidos, hasta finalmente alcanzar la escritura.
Es importante fomentar el desarrollo de un correcto agarre del lápiz ya que un agarre ineficiente puede afectar de manera negativa al control de los movimientos, lo que provoca en los niños mala letra, necesidad de emplear más tiempo, cansancio y molestias.
El uso de pinturas, rotuladores, ceras, etc.., comienza en los años preescolares, aunque es necesario que previamente se haya ido desarrollándose un número de actividades variadas como el gatear, jugar con arena, plastilina, agarrar, alcanzar, tirar, soltar, aplastar, empujar, rasgar, hacer puzles, construcciones… Estas destrezas necesarias para conseguir un agarre de los útiles de escritura de manera efectiva, requieren de un trabajo conjunto de aspectos cognitivos, perceptivos y sensorio-motores.
El patrón óptimo de agarre para desempeñar actividades manipulativas requiere una diferenciación entre los dos lados de la mano implicados: el primer dedo, índice y corazón (parte radial) aportan un control dinámico al útil de escritura, mientras que el anular y meñique (parte cubital) aportan la estabilidad necesaria.
Antes de alcanzar un agarre eficiente el desarrollo suele ir avanzando de manera evolutiva siguiendo los siguientes patrones, no son patrones cerrados y puede haber muchos otros intermedios. También puede no llegar a desarrollarse una pinza trípode, pero conseguir una pinza funcional que permita el manejo adecuado del útil de escritura.
A partir de los 5-6 años, cuando una pinza ha sido establecida y el niño puede realizar un uso funcional con ella será muy difícil variarla.
Presa cilíndrica o presa palmar supinada: Aparece entre el año y año y medio. Se emplea toda la mano para sujetar la herramienta, y el movimiento procede de segmentos proximales (se mueve el hombro y el brazo para mover la mano). Se trata de un agarre estático.
Presa digital pronada: Aparece entre los 2-3 años. Los dedos sujetan la herramienta, el hombro comienza a ser más estable y entonces los movimientos proceden de segmentos más distales (codo y antebrazo). Se trata de un agarre estático.
Pinza cuadrípode: Aparece a los 3 años y medio o 4 años. Los cuatro dedos participan en el agarre. Ahora el movimiento procede de la muñeca y la mano, y hay mayor estabilidad de hombro y codo. Inicialmente es un agarre estático aunque puede evolucionar y convertirse en dinámico.
Pinza trípode: Aparece entre los 4 años y medio y se desarrolla y perfecciona hasta los 7 años. En ella participan el dedo pulgar índice y corazón. Inicialmente los tres dedos funcionan de manera unitaria, para posteriormente madurar hacia una pinza trípode dinámica.
Artículo estraído del blog Entreteo escrito por Sonia de Lama Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario